No son pocas las ocasiones en las que nos empeñamos en tener lo último, lo más nuevo. Solemos tender a despreciar esos productos de siempre, los de toda la vida, sin darnos cuenta de que son mejores de lo que nos pensamos. Esto suele ocurrir, entre otras cosas, porque estos productos no invierten tanto en publicidad, en parte porque no la necesitan, ya que su prestigio les avala. Esta discreción hace que estén ocultos por otros productos con más publicidad y fama actual.
Por ello, hoy os quiero hablar de esos productos de siempre, de los que encontramos en el baño de nuestras abuelas, y que las han acompañado durante años. La selección de productos variada, hay desde geles hasta colonias o pastillas de jabón, por lo que seguro que hay algún producto que se adapta a vuestras necesidades. Todos ellos son ideales para montar un spa en casa o para añadirlos a nuestros imprescindibles de maquillaje. De todos modos, si quieres más recomendaciones sobre belleza puedes pasarte por perfil de Instagram @fallingfora (no os olvidéis de seguirnos también allí) donde compartimos de lunes a viernes contenido que os será muy útil. Como siempre, pinchando sobre la imagen podréis acceder a la web para comprar la prenda.
Crema de Nivea
La crema hidratante de toda la vida y que las madres siempre recomiendan, ¿o no? A pesar de que llevo toda mi vida obsesionada con las droguerías y sus productos, no he sido capaz de valorar esta crema hasta hace poco. Llevamos casi un año lavándonos las manos continuamente y usando hidrogeles, y no sé vosotras, pero yo tengo las manos destrozadas. Desde hace un tiempo uso esta crema para las manos y no me puede ir mejor. Es muy hidratante y espesa, y no tarda mucho en absorberse. El precio es muy competitivo y el tamaño mini es ideal para llevarlo en el bolso.
Vaselina Gal
Si hablamos de productos de “siempre” es esta vaselina la primera que se me viene a la mente. De pequeña siempre tenía algún tarro en los bolsillos del abrigo del colegio y del babi (beauty addict se nace, no se hace) y aún recuerdo su olor tan característico. Es una vaselina que hidrata súper bien los labios, y que es ideal para mezclar con otros labiales. No tiene nada que envidarle a Letybalm o Carmex, a pesar de que son las opciones más populares hoy en día.
Pastilla de jabón de Dove
Las pastillas de jabón están de moda, por eso en ocasiones nos gastamos una fortuna en fórmulas novedosas, diseños llamativos o marcas en auge, pero esta opción de Dove es de las mejores. La pastilla de belleza de Dove es ideal para las personas que buscan una rutina más minimalista y ecológica. Está pensada para limpiar las manos y la cara, y tiene una fórmula hidratante, por lo que no reseca en exceso. La podéis encontrar en droguerías o supermercados, y el precio no puede ser mejor.
Colorete de Maderas de Oriente
Mi primer colerete fue de Maderas de Oriente, y la verdad es que lo sigo recordando porque me encantó. Además de ser un producto muy económico, la calidad es inmejorable, los tonos que tienen son preciosos y le quedan bien a casi todas las pieles. Es cierto que no son los coloretes más pigmentados, pero son ideales para un ‘make-up-no-make-up’ o para las que tendemos a pasarnos con el colorete.
Gel moussel
¿Tengo obsesión con este gel? Sí. ¿Huele de maravilla? También. Llevo viendo este gel en los pasillos de supermercados y droguerías toda la vida y siempre me habían dicho que olía muy bien, pero hasta que no lo probé por mí misma no me lo creí. Además de un olor tan característico (y persistente) deja la piel súper bien. En los últimos años han sacado otra línea de color blanco que es incluso más hidratante pero con el mismo olor.
Gotas de Mayfaire
Es una colonia de toda la vida y siempre había un bote en mi casa. Además de tener un olor muy agradable y fresco dura un montón de tiempo. Yo la uso después de la ducha, a modo de bodymist, y la verdad es que así es como más me gusta usar este producto. Tengo la sensación de que así dura más el olor. El frasco es enorme (os prometo que un bote dura bastante tiempo) y el precio es más que asequible. Hay distintas líneas y olores pero el tradicional es el del tapón verde (y también es mi favorito).